Antes de convertirse en jugador del Nápoles, Hirving Lozano tuvo que labrarse un puesto en Pachuca, equipo de la Liga Mexicana desde el que dio el saltó a Europa. El Viejo Continente recibió al azteca en la 17-18.
Para entonces, el extremo se incorporó al PSV, donde despuntó y confirmó las expectativas esperadas. Anotó 40 goles en 79 encuentros, además de repartir 17 asistencias, unos números que le han llevado a ser uno de los referentes del actual líder de la Serie A.