Ni las ocasiones ni las dos expulsiones en Corinthians desnivelaron el marcador en el partido entre el conjunto de Vágner Mancini y Gremio. Un empate a cero por el que se puede culpar abiertamente al arquero Vanderlei.
El guardameta de Gremio cuajó una gran actuación, pero alcanzó su clímax en el encuentro con una brutal parada a Fagner en el interior del área y tras un chut prácticamente a bocajarro. Una exhibición de reflejos digna de los mejores porteros de Europa.
Solo había que observar la carita que se le quedó a Fagner para entender la importancia de su aparición. No se lo podía creer el delantero de Corinthians... y no es para menos.