Villar, según informa 'El País', ha presentado en la Audiencia Nacional un escrito en que advierte que se vulneran los estatutos de la FIFA. Solicita la suspensión de la Federación por "injerencia gubernamental" del CSD, por la que Villar se ha dirigido a los tribunales.
En la actualidad, el Gobierno, formado por el PP de manera interina, no tiene apenas fuerza para hacer frente al envite de Villar, que, por otro lado, no ha demostrado las ayudas al Recreativo de Huelva y el Marino, los casos que podrían dejarlo al borde de la inhabilitación.
La amenaza invocando a la FIFA es el contragolpe de Villar después de que la FEF solicitara la suspensión cautelar de las elecciones. El mismo recurso, con las mismas amenazas, fue usado por Villar en 2008 cuando Jaime Lissavetzky puso el grito en el cielo. La FIFA se personó en España, amenazó y el Gobierno cedió.
“El doble discurso de cuándo acogerse a lo que dice el Gobierno español o la FIFA es muy propio de Villar”, asegura un empleado de la federación en 'El País', que no recurrió otras órdenes ministeriales cuando le favorecían al cargo.