El futbolista del filial, y desde algunas semanas en el primer equipo, ha comentado: "Vengo de un equipo que no ha cobrado nunca en Extremadura, no tengo ningún colchón económico y me están apoyando mis padres".
Waldo, asimismo, ha indicado que otros compañeros de fuera atraviesan las mismas dificultades, pero que en su caso está intentando seguir trabajando: "Y estoy apoyando a mis compañeros en lo que decidan, además de tratar de aprovechar la oportunidad y seguir con esta dinámica".
"Esperemos que todo se solucione cuanto antes", ha expresado Waldo, que confía en que el equipo pueda luchar por el ascenso, como parte de la solución a los problemas económicos de la entidad.
Por su parte, el mediocentro Manu Molina, ha confirmado que ha denunciado al club por los impagos y ha esperado que Pablo Comas, máximo accionista, busque una solución: "Todo trabajador quiere cobrar, yo también, esperemos que se solucione".
Molina ha expresado, también, su temor a que compañeros dejen el equipo ante la falta de pago. "Espero que no se vaya nadie y estemos todos unidos, que se pueda solucionar lo económico para que nadie se marche", ha indicado.