Malas noticias para el combinado helvético. Xhaka, una de sus estrellas, tuvo un contratiempo en la concentración de la selección en Lugano. Y es que el centrocampista cayó lesionado de forma repentina.
El jugador suizo se vio obligado a tener que dejar el entrenamiento al sentir un fuerte dolor en su rodilla izquierda y fue trasladado al hospital, con el objetivo de realizarle pruebas más determinar el alcance exacto de la lesión.
Xhaka se marchó entre lágrimas y eso hizo ver a compañeros y cuerpo técnico que la cosa no pinta nada bien. De momento, el futbolista del Arsenal es baja segura ante España y es sería duda para llegar al Mundial.