Después de muchas vueltas, parece que finalmente Virgil Van Dijk tendrá que seguir en el Southampton o apostará por un club de nivel medio-alto.
El Manchester City se negó a desembolsar los 70 millones de libras que pide el equipo rojiblanco por su fichaje y no habrá traspaso a no ser que haya un cambio radical en las posturas de ambos clubes.
Guardiola tendrá que buscar, por tanto, un nuevo refuerzo para su mermada defensa. Aunque se daba por hecho el traspaso de Van Dijk, el futbolista ha visto cómo primero el Liverpool se negaba a ficharle y luego era el Manchester City el que decía 'no' a su llegada por el alto precio puesto por el Southampton.