Ya tenemos final: Francia-Croacia
Mario Mandzukic llevó a su país a la final cojeando, rematando con las últimas gotas de sudor al fondo de las mallas un balón que le llovió tras un mal despeje de Walker y una prolongación de Perisic.
Henchido de pundonor, el delantero de la Juventus exhibió su indomable gen competitivo para enviar a Inglaterra a casa en el minuto 108 de la prórroga, tras empatar un encuentro que se puso cuesta arriba con tempranero tanto de Trippier.
Croacia aplastó a Nigeria y Argentina en los dos primeros partidos de la fase de grupos, pero sufrió para vencer por la mínima a Islandia, sembrando las dudas que tardó en despejar tanto en octavos como en cuartos de final.
Abonados a la lotería de los penaltis, la Selección Croata se llevó el primero ante Dinamarca y, días después, frente a Rusia para plantarse en unas semifinales que alimentaron el optimismo de toda una generación.
Francia quiere bordar su segunda estrella
En Luzhnikí, a Croacia le espera una Francia crecida tras exhibir su solidez ante Bélgica. El combinado de Deschamps desquició a Hazard y cía, imponiéndose por 1-0 en un alarde de pragmatismo que desató la impotencia de su rival.
A lomos de Griezmann y Mbappé, los galos fueron creciendo durante el torneo. Tras vencer a Australia y Perú por la mínima, Francia empató con Dinamarca y generó ciertas dudas que disipó ante Argentina con contudencia.
La explosión mundial del 'crack' del PSG dio alas a la Selección Francesa, que destrozó la fortaleza defensiva de Uruguay en cuartos y anuló el potencial ofensivo de Bélgica en semifinales, subrayando su candidatura para el Mundial.