Pocos fichajes han resultado más rentables para el Barcelona como lo ha sido Yerry Mina. El colombiano llegó a Can Barça el pasado mes de enero por 12 millones de euros, procedente de Palmeiras.
Al principio dejó dudas respecto a su adaptación al estilo de juego 'culé'. Además, la presencia de Samuel Umtiti y Gerard Piqué como titulares indiscutibles no ayudaron en este proceso.
En total, Yerry Mina disputó seis encuentros oficiales como azulgrana (cinco en Liga y uno en Copa). No obstante, las actuaciones de Mina con la Selección Colombiana hacían que en el Camp Nou aún se confiara en él.
El Barça finalizó la temporada con la idea de vender al poderoso central, aunque la directiva no se esperaba lo que ocurriría en la Copa del Mundo.
El Mundial de Rusia sirvió para mostrar qué es capaz de hacer el futbolista 'cafetero'. Yerry Mina fue fundamental para que su combinado lograra alcanzar los octavos de final, pero no consiguió evitar caer eliminado ante Inglaterra en la tanda de penaltis.
El nuevo defensa 'toffee' anotó tres goles en todo el campeonato, incluído el que llevó a la prórroga el Colombia-Inglaterra. Ocho meses después de su desembarco en España, el Everton apuró las últimas horas del mercado inglés para llevarse a una de las revelaciones del Mundial por 30 'kilos'.
Un negocio redondo que beneficia a las tres partes. Aún así, el Barça prefiere prevenir y se guardó una opción de recompra por el jugador que alcanza los 60 millones de euros.
9 de agosto de 2018