En un deporte que depende de tantos contextos, variables y que se decide por detalles, la eficacia es un bien preciado. Por eso resulta tan interesante estudio de BeSoccer Pro, que intenta medir la calidad de los tiros de los jugadores que pertenecen a equipos de las grandes ligas. Aplica un filtro para generar una bolsa de jugadores que han jugado al menos 10 partidos y han marcado al menos 5 goles (sin contar penaltis) en lo que va de temporada.
Para quedarnos únicamente en el estudio con la mencionada calidad de los disparos, no entran en la valoración los tiros desde el punto de penalti. Ni para el cómputo de los llamados tiros reales ni para el de los goles reales (tantos sin contar los que llegan desde los 11 metros).
El máximo exponente, en cuanto a promedios, de los futbolistas que menos tiros reales necesitan para marcar es Choupo-Moting, aunque con asterisco. El delantero del Bayern de Múnich ha marcado 8 tantos tras 16 disparos para dejar su media por encima del resto: 2 tiros reales por gol. Cierto es que engordó gran parte de su cuenta en el duelo de treintaidosavos de final de la DFB Pokal ante el Bremer SV (0-12) con cuatro dianas.
El segundo puesto de los futbolistas que menos disparos necesitan para ver portería de media es para Juanmi. El malagueño, aupado con Manuel Pellegrini en el Real Betis, deja su promedio en 2.40: 15 goles reales tras 36 disparos. Sin penaltis.
En un tercer escalón y todos en una media de 2.80 tiros reales por gol, quedan Konstantinos Mavropanos (14 tiros y 5 goles), del Stuttgart; Pere Milla (14 tiros y 5 goles), del Elche; y Marcus Forss (15 tiros y 6 goles), del Brentford. Algo por detrás, con 2.86 intentos por diana, asoman Hugo Ekitike, del Stade de Reims, y Roberto Firmino, del Liverpool, mientras que Alberth Elis, del Girondins, y Masaya Okugawa, del Arminia Bielefeld, les siguen con una media de 2.88 tiros por gol. Cierran Takumi Minamino (Liverpool) y Kolo Muani (Nantes) con un promedio de 3 disparos.
La increíble caída de Yilmaz
Burak Yilmaz, uno de los grande artífices del título de la Ligue 1 que levantó el Lille en la temporada 2020-21, es ahora el futbolista de las grandes ligas (con un mínimo de 10 partidos y 5 goles) que más disparos sin penaltis necesita para marcar. Un dato sorprendente, pero que refleja el bajón del atacante turco en este curso. 75 disparos, 5 goles (15 de media). Llama la atención que sea él, un '9' puro, el que lidere este apartado negativo.
Junto al turco, pero con menos responsabilidades, a priori, de cara a portería le siguen Houssem Aouar (Lyon), con 12.40 tiros necesarios para marcar (62 intentos, 5 tantos), y Hakim Ziyech (Chelsea), que promedia un tanto cada 11.80 disparos reales (59 tiros, 5 goles).
Andrea Pinamonti, del Empoli, es el cuarto futbolista de las grandes ligas que más intentos necesita a portería (10.60) para apuntarse un gol. En los mismos números está Iñaki Williams, del Athletic, en este apartado. No terminan de brillar tanto por esa falta de puntería que se hace notar.
Hirving Lozano (10.20) y Paulo Dybala (10.13) tampoco son unos 'killers' al uso. Generan ocasiones, tienen oportunidades para marcar, pero están entre los futbolistas que más intentos necesitan para poder marcar. Como Lautaro Martínez, que no termina de engrasar en el Inter. En este curso, promedia 9.88 tiros reales por gol. Una historia distinta de la que vive con Argentina.