La temporada es larga, pero el estreno habla de que el técnico francés podría tener razón. Porque la pretemporada de Marcelo había sido buena, pero las promesas se quedan en nada cuando arranca lo oficial. Y ahí Marcelo dio el callo.
El lateral zurdo, que volverá a ser uno de los capitanes, estuvo involucrado en la génesis de los tres tantos conseguidos ante el Celta. Además, se le vio bastante activo en ataque, como siempre, muy lejos de esa versión deprimida que exhibió casi continuamente con los tres entrenadores que tuvo el año pasado.
Es más, según un seguimiento de 'Marca', Marcelo repartió cuatro pases clave en el partido y únicamente Kroos tocó más veces el balón que el brasileño, que jugó el balón hasta en 75 ocasiones, números más propios de un atacante que de un defensor.
Además, el Real Madrid atacó en Vigo por su banda un 4% respecto a las cifras del año pasado y el rival penetró por su lado un 6% menos. Ello entroncaría con la mejoría física del jugador.
Queda mucho por delante y llegarán partidos muy exigentes, si bien Marcelo parece listo para la pelea.