China se convirtió en un terreno abierto a la llegada de reconocidos futbolistas de gran recorrido internacional desde los años 2000. Aun con la aplicación de regulación a los salarios y de la pandemia del coronavirus, este país continúa teniendo a valiosos jugadores dentro de su estructura deportiva, ya sea en Superliga o Primera Liga.
Uno de los clubes con mayor talento es Shanghái SIPG, ya que cuenta con Oscar, Marko Arnautović y Hulk en la misma plantilla. Otras dos instituciones importantes son Guangzhou Evergrande y Guangzhou R&F, que son representadas dentro del terreno de juego por Paulinho y Anderson Talisca, por un lado, y Moussa Dembelé, por otro.
La lista de profesionales destacados sontinúa con Marouane Fellaini, Graziano Pellé (Shandong Luneng Taishan), Renato Augusto, Cédric Bakambu, Jonathan Viera (Beijing Sinobo Guoan), Miranda, Alex Teixeira, Éder (Jiangsu Suning), Stéphane M'Bia, Giovanni Moreno, Stephan El Shaarawy (Shanghái Greenland Shenhua), Marek Hamšík, Salomón Rondón (Dalian Professional) y Augusto Fernández (Beijing Renhe).
Además, otros jugadores de señalada carrera en Europa dotan de jerarquía el fútbol chino: Romain Alessandrini (Qingdao Huanghai), Nikica Jelavić (Guizhou Hengfeng), Rômulo (Shijiazhuang Ever Bright), Alan Kardec (Chongqing Dangdai Lifan) y Sandro Wagner (Tianjin Teda).
Situación especial merece Daniel Carriço, defensor que conquistó tres Europa Leagues y es muy querido en Sevilla, pero que debe aguardar para jugar con su nuevo equipo, el Wuhan Zall, por el hecho de que se localiza en la ciudad donde brotó el coronavirus.