Arreón, siesta y a semifinales

El Chelsea reafirmó su favoritismo para ganar la Europa League, aunque bien hará en no tener despistes como los que tuvo frente a un Slavia de Praga al que le penalizó su horrible inicio de partido. En 17 minutos, el Chelsea puso todo patas arriba gracias al buen hacer de Pedro y Giroud. En la segunda mitad, los checos apretaron y recortaron.

Pedro abrió la cuenta en el minuto 5 después de una fantástica combinación colectiva del Chelsea. Al primer toque, con pases inteligentes y dinamismo. Muy de Sarri el gol. Cuatro minutos después, Pedro también fue protagonista en el 2-0. Remató a un palmo de la portería, pero lo hizo contra el poste. El rechace topó de forma cómica en la cabeza de Deli y terminó dentro del arco.

No se enteraba el Slavia, cada llegada del Chelsea se convertía en ocasión. Giroud, que estuvo brillante en la primera mitad, anotó su décimo tanto en la competición en el minuto 17. Estaba todo hecho y ni siquiera hizo falta al mejor Hazard, lastrado por un pisotón en los primeros compases. De hecho, el belga se fue al banquillo a 25 minutos del final.

Inevitablemente, el Chelsea dio un pasito atrás. Lo aprovechó el Slavia, que de la desgracia hizo virtud. Marcó Soucek, aunque Pedro respondió para abrochar su doblete en el minuto 27. 4-1 en Londres, 5-1 en el global. Nadie, salvo los jugadores del Slavia, pensó en un cambio abrupto que terminó por llegar.

Pero el fútbol es maravilloso por reacciones como la de los checos, que en tres minutos, del 51' al 54', enmudecieron Stamford Bridge. Sevcik anotó el 4-2 y el 4-3, el segundo de ellos con un derechazo imponente al que Kepa no encontró reacción. Quedaban casi 40 minutos y la respuesta de Sarri fue sentar a Hazard.

Guardó la ropa con Willian y Jorginho, dejando exclusivamente a Giroud en punta. El Slavia tuvo sus opciones, pero no llegó a concretar un empate que hubiera hecho temblar al Chelsea. Le fue suficiente al Chelsea para poner los dos pies en semifinales, en las que espera el Eintracht de Jovic. En una temporada para olvidar, los de Sarri están a dos partidos de una final.