El joven ariete polaco ha concedido una entrevista al diario 'AS' en la que explica cómo ha sido su aterrizaje en la élite. Debutó con el Wisla el pasado curso, y en este ha empezado a hacerse hueco en el lauredo club de Cracovia.
Recordó, por ejemplo, cómo vivió su debut con el primer equipo, en marzo de 2019, con 16 años casi recién cumplidos. "Fue breve, pero estaba ideado como la primera toma de mi llegada al fútbol profesional", explicó.
"Lo recuerdo con mucha alegría porque debuté en un equipo en el que he pasado una gran parte de mi vida", añadió al respecto Buksa.
Asegura que nada de eso está afectando a su vida, y que es un adolescente normal y corriente. Futbolísticamente, dijo aprender de todo lo positivo y negativo que vive y ve, en lugar de intentar imitar a un ídolo en concreto.
También dijo ser consciente de que se está forjando una buena reputación. "Sé que mi gran rendimiento en la Ekstraklasa (Primera División polaca) generará ese interés de muchos, así que lo tengo que tratar como parte de mi trabajo y no caer en una euforia innecesaria. Siempre busco la mejor opción para mi crecimiento", afirmó.
Restó importancia, eso sí, a quienes le definen como el 'nuevo Lewandowski'. "A los periódicos a veces les gusta llamar la atención con titulares espectaculares. Por supuesto, cualquier artículo de ese tipo sube el listón y que me llamen así es un desafío para mí", contestó, recogiendo el guante, para finalizar.