Si Messi es legendario, Ansu Fati pide paso. Entre el joven y el veterano compensaron el mal inicio del Barcelona frente al Ferencvaros en su primer partido de esta temporada en la Champions League. Al joven jugador no le tiembla el pulso.
Aprovechó el viento de cola generado por el tanto de su capitán para poner en jaque mate a los rivales. Su moral fue a menos porque pasaron de haber podido ponerse por delante en el mismísimo Camp Nou a cometer un claro error, el penalti a Leo.
El canterano hizo su gol de volea gracias a un buen pase de De Jong. Se entendió con él a las mil maravillas para desconectar a la defensa contraria, que no pudo hacer nada ante la internada. El golpeo, algo extraño, valió para batir a Dibusz.
También llamó la atención la dedicatoria de Ansu. En un principio, se pensó que quizá quiso mandar un mensaje a algún hermano o a su madre. En otro encuentro, hizo referencia a su hermana porque, debido a sus quehaceres como futbolista, no pudo ir a su cumpleaños, pero, en esta ocasión, quiso mandarle un mensaje a su sobrino.