Una semana después de conseguir la remontada más grande de la historia en Europa con un 8-1 que dio la vuelta al 4-0 de la ida ante el Dinamo Minsk, el Zenit ruso volvió a demostrar que no quiere quedarse sin Europa League.
Unos pocos minutos les vale a Dzyuba, Ivanovic y compañía para darle la vuelta a un resultado adverso. Lo demostraron en ese histórico partido con cuatro goles en 14 minutos e hicieron lo propio este jueves ante el Molde.
El partido de ida de clasificación a Europa League comenzó dándole la espalda al club ruso, que actuaba como local, ya que Hestad, poco antes del descanso, firmó un 0-1 que despertó al equipo de Sergey Semak en la segunda mitad.
En el 71', la estrella Dzyuba logró empatar. Diez minutos más tarde, Zabolotnyi abrió brecha en el marcador con el 2-1 y, ya en el descuento, fue el turno de Mevlja, quien dejó la eliminatoria casi sentenciada con el definitivo 3-1.
El resultado deja muy de cara la clasificación. Ya sólo queda un obstáculo, la vuelta en Noruega, que se disputará el 30 de agosto a las 19.00 (hora española).