La frase de que un buen equipo comienza siempre por una buena defensa sigue muy presente. Tal vez el significado inicial de la misma haya quedado un tanto obsoleto, pero es verdad que ningún conjunto va a ninguna parte si los de atrás, ya sean tres, cuatro o cinco, no están finos.
Borussia Dortmund, Liverpool y Atalanta llevan ya unos cuantos años manteniendo una decidida apuesta por el fútbol de ataque y, según un informe de 'ProFootballDB', el laboratorio de datos de BeSoccer, los tres equipos tienen a las tres parejas de laterales más productivas del Viejo Continente.
La Bundesliga regresó este sábado y lo hizo con una nueva exhibición del Borussia Dortmund, en un choque en el que Achraf y Guerreiro estuvieron muy finos. Observando a ambos, llegó a parecer que el fútbol no ha estado detenido durante prácticamente dos meses en todo el planeta.
El marroquí y el portugués estuvieron especialmente incisivos y, fundamentalmente el segundo, fueron decisivos para la goleada al Schalke 04. Guerreiro es el ejemplo perfecto de lateral total y lo demostró en el derbi del Ruhr. Apareció por la derecha, por la izquierda... y cerró su gran actuación con dos tantos con los que elevó su producción ofensiva a nueve dianas (siete goles y dos asistencias).
Achraf no regaló ninguna diana y tampoco marcó, pero sí que volvió a exhibir su imponente físico. Uno de sus arreones provocó la lesión de Todibo, pero no fue el único, pues vivió de manera constante en el área rival. Esa confianza en ataque le ha permitido ayudar a su equipo a generar la friolera de 13 tantos en 26 partidos, de los que tres han sido goles y diez, asistencias.
El buen hacer en ataque del Borussia Dortmund ha encontrado parangón en el Liverpool, intratable durante toda la temporada en la Premier, pero que empezaba a quedarse sin aire justo antes del frenazo al fútbol por la pandemia.
En el cuadro 'red', la temporada 2018-19 de Trent Alexander-Arnold y Andrew Robertson ya fue espectacular y ambos se han empeñado en demostrar que aquello no fue flor de un día. Fundamentalmente el primero, lanzado al estrellato por el córner ante el Barça, que ha sido el mejor lateral ofensivo de lo que va de curso.
Alexander-Arnold llevaba 14 tantos generados (dos goles y 12 asistencias) en el momento en el que paró la Premier League. Sus características físicas y técnicas, y su picardía, por qué no, le permitieron, pese a jugar como lateral, estar a la altura de todo un mediapunta como Kevin de Bruyne. Solo el jugador del Manchester City, más habituado a combinar con delanteros y extremos, repartió más pases de gol que él en las 29 primeras jornadas ligueras, lo que habla muy bien de su crecimiento y su asentamiento en la élite europea.
En el otro costado, el izquierdo, Robertson continuó con el sólido fútbol desplegado en la temporada 2018-19. Ligeramente más defensivo que su compañero en el Liverpool, mantuvo una destacada presencia en el fútbol total del Liverpool, capaz de acumular 27 jornadas sin perder en la Premier League hasta la derrota ante el Watford. En ese tiempo, el escocés no desentonó y, con su gol y siete asistencias, llegó a las ocho dianas producidas en el campeonato inglés.
Finalmente, muchos dicen que en Italia el equipo que mejor fútbol lleva practicando en los dos últimos años es el Atalanta. Los de Bérgamo incluso pasearon un fútbol de muchos quilates en la Champions League, competición en la que están entre los ocho mejores a la espera de que se reanude en agosto.
En la eliminatoria de octavos de final ante el Valencia, destacó el lateral derecho Hans Hateboer, que firmó un doblete en el partido de ida. El internacional por los Países Bajos forma junto a Robin Gosens la pareja de laterales más sólida del 'Calcio'.
Hateboer ha aportado tres asistencias en la Serie A, en tanto que el alemán Robin Gosens, desconocido hasta su llegada al equipo de Bérgamo en 2017, ha sido decisivo en la gran campaña del Atalanta, al participar en siete goles y cinco asistencias dentro del esquema de carrileros profundos que suele plantear Gasperini.
Los seis son el ejemplo más claro de que hay dichos en el fútbol que nunca mueren, por mucho que con los nuevos tiempos y la nueva forma de jugar obliguen a buscar un nuevo significado a los mismos.