No es un derbi cualquiera el que se vivió en Butarque. Un partido que se jugó en campos de barro, en Tercera División, en Segunda División B y en Segunda, pero que vivió este viernes su tercer partido en la élite.
No son solo tres puntos los que se ponen en juego en un choque que, además, deja insatisfechos a unos y a otros. Mereció más el Getafe en la primera mitad, pero acabó pidiendo la hora ante el empuje del Leganés.
Tuvo las primeras ocasiones un conjunto 'pepinero' que llegó en el mejor momento de la temporada. Soria, con dos salidas en falso, estuvo a punto de dejar marcar a un En-Nesyri al que se le fue el gol por centímetros.
Respondió el Getafe, que poco a poco se fue haciendo el dueño del partido. Primero con un Jaime Mata que estuvo cerca de materializar el gol pero que se estrelló en Cuéllar. Después, un Arambarri que besó el poste diestro del arco.
Precisamente en la jugada de Arambarri se hizo daño Amath. El jugador del Getafe, en un giro, se fue al suelo y, tras varios minutos, se tuvo que marchar a vestuarios para dar paso a un Portillo que tampoco acabó el partido.
Ocasiones del Leganés, gol del Getafe
Insistió el Getafe, que fue apretando poco a poco, pero reaccionó bien el Leganés. Hasta tres ocasiones consecutivas tuvieron los de Pellegrino para ponerse por delante, pero siempre con un protagonista en común: David Soria.
Lo que parecía una falta insignificante se convirtió en el primer estallido de la grada visitante. Centró Damián Suárez un balón que se paseó por el área hasta que llegó Cabrera, casi en el suelo, para cabecear y marcar el primer tanto.
Pudo llegar el segundo del Getafe en la reanudación. Jorge Molina, acostumbrado a bajar el balón a otros compañeros, se lanzó a la carrera para disparar un lanzamiento que se estrelló en el lateral de la red.
No decayó el ánimo en un Leganés que dio un paso adelante buscando un gol que acabó encontrando. Fue tras un gran derechazo de Nyom. El lateral, poco acostumbrado a estas lides, puso el balón junto al palo para que no llegase Soria.
Insistió el conjunto 'pepinero', pero se reforzó el Getafe atrás y dejó pocas oportunidades más. En los últimos minutos se marcharon Portillo y Óscar notablemente enfadados, más el primero tras haber sido el primer relevo.
Cuando todo parecía abocado al final del partido, apareció la acción más polémica del partido. González Fuertes entendió que Rubén Pérez entró demasiado fuerte a un balón dividido con Cristóforo y le enseñó la roja directa. Ahí acabó un encuentro que dejó un regusto amargo, más para el conjunto local que en el visitante.