El internacional español del Real Madrid realizó un desafortunado penalti que ofreció el empate a Italia. Pero Ramos no pidió disculpas ante los medios, ni reconoció su error.
Más bien todo lo contrario. Ramos declaró ante los medios de comunicación: "Que disfruten los que rajan, ya callaré bocas".
Nada que ver en comparación con el argentino Javier Mascherano, tras el empate de la Albiceleste ante Perú. El 'azulgrana' asumió su culpa por su error cometido en el gol del rival y pidió disculpas ante los medios.
Mascherano se dirigió a su afición ante los micros: "Lamentablemente, por mi error, no nos llevamos los tres puntos".
Dos veteranos jugadores, dos grandes figuras del Real Madrid y del Barça, dos capitanes, dos imprescindibles de España y Argentina. Pero dos formas muy diferentes de asumir un error.