15 meses después, Marcano volvió a competir

Un año y tres meses de calvario ha tenido que esperar el central cántabro Iván Marcano para recuperar la titularidad en el Oporto, después de que en mayo de 2020 -en pleno parón liguero tras estallar la pandemia- se rompiera el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha.
Con 34 años, el central apuró su recuperación la pasada campaña en el filial del Oporto, pero unos problemas musculares volvieron a cortar su evolución.
Esta temporada, el zurdo que se formó en la Escuela del Sardinero comenzó en plenas facultades la pretemporada, aunque el técnico Sérgio Conceiçao ha apostado, de momento, por la dupla que forman en el centro de la zaga el veterano ex madridista Pepe y el internacional congoleño de 27 años Mbemba, que llegó a los 'dragones' en el verano de 2018.
En la temporada 2019-20, Marcano y Pepe eran los fijos de Conceiçao y se habían convertido en una de las parejas defensivas más eficientes de Europa. Si alguno de los dos fallaba, el reserva Mbemba era el sustituto.
Sin embargo, todo cambió tras la lesión de Marcano, que en el verano de 2019 había regresado a la ciudad del Duero, tras una mala experiencia en el conjunto de la Roma, a la que llegó de la mano de Monchi.
El domingo, tras 15 meses de sequía, Iván Marcano volvía a recuperar el estatuto de titular, con la salvedad de que no era en el centro de la defensa.
En su dibujo 4-4-2, el entrenador portista probó en el primer partido liguero para el lateral izquierdo al lusoguineano Wilson Manafá.
En el segundo encuentro, la apuesta para esa demarcación fue por el internacional nigeriano Zaidu, aunque, tras la contienda, Conceiçao fue muy duro con el defensor, tras una pérdida de balón.
Por sorpresa, Marcano encontró este domingo un hueco en el once titular para el lateral izquierdo e, incluso, logró sumarse al ataque en alguna ocasión.
Se le notó la falta de ritmo, aunque aguantó hasta el minuto 81, en un partido en el que el cántabro tiró de veteranía, a pesar de que el Oporto no logró pasar del empate a uno ante el Marítimo que entrena el salmantino Julio Velázquez.
Marcano debutó en la Primera División con el Racing de Santander a los 18 años, de la mano de Marcelino García Toral, y, más tarde, fichó por el Villarreal que entonces dirigía Valverde.
Tras la marcha del técnico, el central perdió la condición de titular con el 'submarino amarillo' y se marchó al Getafe por petición expresa del entrenador Miguel González 'Michel'.
Después, encadenó una serie de cesiones por clubes como Olympiacos o Rubin Kazan, hasta que en 2014 llegó al Oporto, donde fue uno de los fijos de la mano de Julen Lopetegui.
Allí se fraguó una buena pareja de centrales entre él y el brasileño Felipe, ahora en el Atlético de Madrid.
En 2018 probó suerte en la Roma, pero no tuvo demasiado éxito deportivo, por lo que, a pesar de que aún le restaban tres años de contrato, regresó al conjunto luso, donde encontró un gran aliado, el veterano Pepe.
Tras 15 meses en el dique seco y a pesar de que ya tiene 34 años, Marcano tiene por delante el reto de conquistar un nuevo título liguero y desempeñar un buen papel en la Liga de Campeones.