No está pasando por un buen momento Álvaro Morata. Muy cuestionado por los hinchas del Chelsea, Conte le ha relegado a la suplencia en favor de Giroud.
Ante el Southampton volvió a partir desde el banquillo, y cuando Giroud marcó, Morata se vio una vez más eclipsado por su competidor.
Pero Conte decidió darle diez minutos. Le dio entrada en el minuto 80, y el delantero madrileño saltó al campo con ganas de comerse el mundo. Y vaya si lo hizo.
A los dos minutos marcó el gol de la tranquilidad, el 2-0, rematando de cabeza un certero centro al segundo palo de Azpilicueta. Pero no se quedó ahí, minutos más tarde tuvo en sus manos el tercero, pero se lo sacaron de la misma línea de gol.
Un tanto con el que Morata se reivindicó, y con el que trató de reconciliarse con una grada que le tiene muy cuestionado.
22 de abril de 2018