El sueño de volver a Segunda tendrá que esperar para el Hércules. Lleva luchando por volver desde 2014, y por primera vez en tres temporadas logró meterse en el 'play off' de ascenso. Parecía que este año sí, pero no.
Porque en su camino se cruzó una Ponferradina que ha firmado un final de temporada impecable. Inmaculado. Y el Hércules pagó los platos rotos. Hipotecó sus opciones de ascenso en el partido de ida, y un gol en el minuto 4 selló su destino.
El Hércules debía marcar tres goles, y no recibir, para revertir la goleada encajada en el Rico Pérez. Con el gol de Sielva, nada más comenzar el partido, los tres goles deberían haber forzado la prórroga.
Pero no llegaron. Porque la Ponferradina supo imponerse, manejar los tiempos y dormir un partido que en ningún momento estuvo cerca de escapársele.
El Hércules saltó al campo pasado de revoluciones, frenético en el ataque y trémulo en defensa. La 'Ponfe' avisó en el minuto 2, y en el 4' Sielva alojó en el fondo de las redes el balón tras cazar un rechace dentro del área. Su disparo, ajustado al poste, fue inalcanzable para Falcón.
Debía el Hércules marcar tres goles en un campo en el que en toda la temporada sólo se habían marcado ocho en la portería local. Una misión no imposible, pero sí harto improbable.
Pese a que el gol recibido no debía haber alterado los planes herculanos, sí que se notó un cambio de actitud. Empezó a echarse en falta cierto criterio a la hora de mover el balón, de atacar.
El balón era del Hércules, pero no lograba poner en peligro a la 'Ponfe'. El conjunto berciano estaba muy cómodo cediendo la iniciativa al rival y jugando a la contra, y así estuvo a punto de sentenciar definitivamente la final.
El Hércules tuvo unas pocas ocasiones de relativo peligro antes del descanso, pero no logró materializar ninguna. De haberlo hecho, el partido hubiera sido otro. Pero no fue así.
Necesitaba el descanso el conjunto visitante. Tomarse un respiro, beber agua y aclarar las ideas. Tras el intermedio parecía que saldría otro Hércules, pero lo que saltó al campo fue una Ponferradina con ganas de marcar el segundo.
Había merodeado el gol de la sentencia en los compases finales del primer tiempo, y nada más comenzar el segundo Zabaco por centímetros no empujó a gol un córner que nadie loró rematar ni despejar.
En torno a la hora de partido, por fin, el Hércules mostró su mejor versión. Fueron instantes en los que, si bien las opciones de remontar la eliminatora seguían siendo remotas, parecía que al menos podía igualar e incluso llevarse el partido. Animar la final, a fin de cuentas.
Pero la 'Ponfe' aguantó, y el partido se rompió. Bolo metió a Yuri, ídolo local, y en la primera que tuvo marcó, pero su gol fue anulado por un claro fuera de juego del primo de Charles Dias.
Con el partido roto, la Ponferradina buscó el segundo empujado por la alegría de El Toralín, que ya se veía en Segunda. El Hércules bajó los brazos y se dejó llevar hasta que el colegiado pitó el final. El ascenso deberá esperar un año más.
Pero no para la Ponferradina, que vuelve al fútbol profesional tres tres años en Segunda B. Y lo hace a lo grande, firmando un 'play off' impresionante, y una temporada regular a la altura de muy pocos.
Acompañará a Racing y Fuenlabrada, y este domingo se conocerá al cuarto ascendido, el que saldrá de la otra final que disputarán el Atlético Baleares y el Mirandés, tras el 2-0 de la ida a favor del conjunto burgalés.