Según fuentes de la Comisión Mixta de LaLiga y la AFE, Arturo Vidal reclama 2,4 millones en conceptos de variables. El Barcelona entiende que esos pagos no proceden y que los bonus ya le han sido satisfechos.
Esta nuncia se puso el 5 de diciembre y en la misma Vidal reclama un dinero que tendría que percibir en caso de jugar el 60% de los partidos del pasado curso (y un mínimo de 45 minutos por encuentro), algo que no llegó a ocurrir.
Los abogados de Vidal interpretan las cláusulas de una forma que no comparte el Barcelona, que cree que el futbolista no debe percibir ese dinero por no haber llegado al mínimo de encuentros que en su contrato está estipulado como condición indispensable para ingresar esos pluses. En la denuncia se desglosan los supuestos impagos.
La información de 'ABC' señala que Vidal avisó el 3 de diciembre al Barcelona de esta deuda por burofax y pide a LaLiga que apruebe su denuncia y actúe.
Al mismo tiempo, el Inter de Milán aprieta para llevarse a Vidal y cree la entidad azulgrana que esta reclamación del chileno se debe a un interés de forzar su salida. Ernesto Valverde no le quiere fuera, pero este desencuentro podría desencadenar la marcha del centrocampista, que montó en cólera por saberse suplente ante el Real Madrid.
"Durante seis largos meses el señor Vidal no ha entendido oportuno comunicar a nadie que él no estaba de acuerdo con la interpretación", recoge en un escrito el departamento jurídico del Barcelona en respuesta a la Comisión Mixta, que advirtió al Barcelona de la demanda del futbolista, tal y como informa 'ABC'.