La Asociación de Fútbol inglesa ha abierto expediente a Garry Monk tras ser expulsado este martes. Según el organismo, el técnico del Birmingham "profirió insultos y lenguaje abusivo hacia el trío arbitral".
La situación se produjo cuando Monk montó en cólera después de que el centrocampista Maikel Kieftenbeld fuera expulsado por el colegiado Tim Robinson.
El entrenador podría ser sancionado con varios partidos sin poder sentarse en el banquillo. El club estudia apelar la expulsión del centrocampista, no la del entrenador.
En el equipo tienen claro que la roja para Kieftenbeld fue injusta. El propio técnico aseguró tras el partido que se trataba de "una decisión cien por cien errónea".