"Es verdad que en Madrid también hace mucho calor, pero bueno, al estar aquí en África teníamos la duda de si las temperaturas iban a ser altas. Es verdad que todos los días hace viento y eso quizá hace que el calor sea más ameno", declaró Rubén Pérez, uno de los capitanes del Leganés, al diario 'Marca'.
Xavi Tamarit, uno de los componentes del cuerpo técnico, avaló la estancia antes de que viajaran los jugadores: "Cuando recibimos la invitación, una de las cosas que nos paraba era la idea que teníamos del clima. El clima, las instalaciones… por eso decidimos viajar en cuanto terminó la temporada para ver, para experimentar lo que era estar en Tánger".
"La decisión fue muy buena porque ya el clima, tal y como nos dijeron, es mucho mejor que lo que la gente piensa. Siempre brisa, por la mañana, nublado, muy fresco e incluso, por la noche, para ponerse una chaquetita. No ha habido quejas sobre eso. En Madrid estamos entrenando a las 8.45 por el calor. Aquí no ha hecho falta madrugar tanto", añadió el asistente.
Esta satisfacción con Marruecos como destino de pretemporada puede ser clave en el futuro, pues quizá el Leganés decida regresar otros años. Si las condiciones climáticas siguen siendo tan positivas, se puede transformar en el ambiente perfecto para el entrenamiento antes de que comience la competición.