Al Villarreal se le atraganta el Maccabi y atrasa su clasificación

El Villarreal tendrá que esperar para cerrar su clasificación a los dieciseisavos de final de la Europa League. Los amarillos no pasaron del 1-1 contra un Maccabi Tel Aviv que se le acabó atragantando en Israel en una segunda mitad muy floja del equipo de Unai Emery. Ahora tendrá que puntuar ante el Sivasspor en Turquía si quiere sacar el pasaporte a las eliminatorias.
Emery rotó, varió su defensa y dio responsabilidad en el ataque a Kubo y Chukwueze, que acompañaban a Bacca en un 4-3-3. Y acabaron dejando dudas pese a una primera parte donde el conjunto 'groguet' dominó y se fue al descanso con el premio del gol.
El delantero colombiano combinó buenas acciones de espalda a portería con otras de lentitud exasperante. Primero armó una volea a la media vuelta que suponía la primera ocasión amarilla, pero luego perdonó el 0-1 por no llegar a un regalo de Glazer que le dejaba solo ante Tenenbaum.
Los villarrealenses estaban cómodos, mantenían el balón y acabaron abriendo el marcador justo antes del intermedio a través de Álex Baena. Aún no ha debutado este año en Liga, pero ya lleva tres titularidades en Europa League y suma dos goles.
Llegó gracias a un buen robo de Rubén Peña, que rompió líneas antes de ceder a Carlos Bacca. El delantero condujo lo justo antes de dejar a Baena solo dentro del área, donde batió con el exterior de la bota derecha al guardameta del Maccabi Tel Aviv. Un golpe del que se repuso a base de bien el cuadro israelí.
Y es que la segunda mitad del Villarreal fue desastrosa, empezando por el empate nada más volver de vestuarios en una cadena de errores que avisaba de lo que venía. Foyth tocó fatal un centro al área, se lo dejó a Biton en el segundo palo y este lo cedió para que Pesic, con el beneplácito de Funes Mori, fusilara a un Rulli que hasta entonces no había sufrido nada.
Instantes después llegó una acción que, visto lo visto, pareció fundamental para el desarrollo del partido. Hablamos del golpe cabeza con cabeza de Pedraza y Glazer. El lateral del Villarreal tuvo que recibir un aparatoso vendaje antes de continuar jugando, pero con unas prestaciones claramente menores, porque por su banda llegó prácticamente todo el peligro del Maccabi.
Primero le regaló un pase dentro del área a Blackman y a su espalda entraron varios centros peligrosísimos de un Cohen que penalizó una y otra vez. A la siguiente, fue Funes Mori el que cubrió mal un desmarque de Pesic tras un envío alto frontal, pero el argentino tuvo suerte de que el serbio picó el balón por encima del larguero cuando estaba solo ante Rulli.
Emery, harto de lo que veía, trató de cambiarle la cara a su equipo metiendo cuatro cambios de una sentada. Entraron Yéremi Pino, Gerard Moreno, Parejo y Fer Niño. Y es cierto que se templó el partido, pero las ocasiones no llegaron a favor del Villarreal y este siguió mostrándose débil en defensa, donde a cada rato venía algún susto de Cohen o Pesic.
Sobrevivía aún así el conjunto amarillo, que pudo adelantarse en un disparo de Gerard Moreno que tocó en un defensa, tomó efecto y acabó estrellándose en el larguero ante la mirada de Tenenbaum. Y al final acabó volcado contra el área rival, auspiciado también por la expulsión de Saborit tras un feo manotazo en una disputa con Rubén Peña.
La llegó a tener Fer Niño en un cabezazo al primer palo en un saque de esquina, pero Tenenbaum reaccionó para salvar el gol de la victoria del Villarreal sobre la línea. Empate que le sirve al equipo de Emery, aunque se deja los deberes fuera de casa contra un Sivasspor que ganó al Qarabag en Estambul.