Señalado y casi sentenciado hace poco más de un año, la llegada de Ronald Koeman al banquillo del FC Barcelona ha supuesto un chute de adrenalina para un Coutinho que, a las órdenes del neerlandés, podría tener una segunda oportunidad para triunfar en el cuadro azulgrana.
Cuando llegó en enero de 2018 al Camp Nou, Philippe Coutinho generó una enorme expectación. En sus primeros meses apuntaba maneras, pero a partir de diciembre de ese mismo año el brasileño se fue diluyendo.
Tal fue su caída que, previa pelea con la afición, acabó saliendo por la puerta de atrás en calidad de cedido el año pasado con la impresión en el imaginario del aficionao del FC Barcelona de que poco quedaba en él del jugador que deslumbró en el Liverpool.
Sin embargo, tras un año en el Bayern de Múnich, la revolución que se ha producido en el cuadro de la Ciudad Condal ha puesto de nuevo a Coutinho en la casilla de inicio y con todas sus opciones de triunfar en el club intactas.
Tal y como señala 'AS', la llegada de Ronald Koeman ha sido un soplo de aire fresco para un internacional brasileño que, de momento, siente la confianza del que fuera seleccionador de Países Bajos.
Koeman, héroe de Wembley en 1992, le ha dado buenos minutos al brasileño ante Nàstic y Girona y Philippe ha respondido con creces con dos goles y dando muy buenas sensaciones sobre el césped.
Además, el nuevo técnico azulgrana ha colocado a Coutinho en la mediapunta y actuando de manera más liberada por la zona izquierda del ataque, las dos posiciones en las que el jugador se siente más cómodo.
Una clara muestra de complicidad por parte de Ronald, que parece contar de pleno con un futbolista que, quién sabe, podría pasar de defenestrado a pieza importante del equipo catalán en cuestión de 12 meses.