Javier Ribelles fue el encargado en el Gimnàstic de Tarragona de marcar a Leo Messi en el primer amistosos del Barça. Hizo lo que pudo hasta desesperar al argentino, quien, según contó el lateral izquierdo en 'El Chiringuito', le llegó a pedir que dejara de darle patadas.
El Barça se impuso al Nàstic en su primer amistoso de pretemporada, que tuvo el aliciente del regreso de Leo Messi tras el culebrón de su posible salida. En él, el argentino se llevó un buen saco de patadas por cortesía de Javier Ribelles, el lateral zurdo tarraconense.
No es ninguna invención, el propio técnico Toni Seligrat confirmó que le dio esa orden a futbolista. Y claro, Messi acabó harto. Alrededor del minuto 26 de partido, al argentino se le vio darse la vuelta para protestarle al lateral del Nàstic después de una falta.
Pues bien, el mismo Javier Ribelles narró para 'El Chiringuito' cómo fue enfrentarse al '10' del Barça. "Fue algo raro, porque cuando dio la charla el míster vi en la pizarra a Messi y dije 'no puede ser'. Y ya luego me volví a centrar y dije 'j*der, esto es un sueño", señaló.
Sobre ese marcaje al argentino, así habló: "Tenía claro que Messi no podía girarse, porque si lo hace y te encara es complicadísimo. En una de esas que va a recibir de espaldas le encimo con todo, con los pies, las manos, con el pecho...".
"Dejó el balón, se giró y me dijo: '¡¿Pero qué haces, boludo?! ¿Quieres dejar de darme patadas, que estás todo el rato igual?' Y yo me quedé sorprendido y le respondí: 'Es que si eres el mejor te tengo que dar patadas, no te puedo dejar girarte porque me vas a ganar", reveló.
Así contaba también cómo es la experiencia de medirse a Messi: "Lo vi como siempre en la tele, con ese rostro serio, como pensando en sus cosas, pero cada vez que cogía el balón cambiaba el ritmo y hacía prácticamente lo que quería".
Eso sí, por mucho que le agarrara, al final no se llevó su camiseta: "Se la fui a pedir, pero imaginé que iba a estar enfadado conmigo. Al final me la dio Griezmann, estuvo muy amable conmigo. La tengo aquí conmigo para siempre".