El malagueño ha recibido la reprimenda de Guede en el vestuario antes de saltar a entrenar después de que trascendieran por redes unas imágenes suyas jugando al fútbol con amigos. El club no se pronunciará al respecto de manera pública, pero estudia la sanción a aplicarle.
Antonio Cortés no está teniendo un año fácil en su regreso a Málaga. El atacante ha vuelto a ser llamado al orden esta temporada, como ya sucedió tras anunciar su posible salida en enero por redes sociales y que provocó otro terremoto institucional. Solo que esta vez sus actos son presuntamente más graves después de que en la tarde de ayer corriera como la pólvora un vídeo del jugador malagueño jugando al fútbol sala con amigos, con la camiseta del Barcelona y fuera de la disciplina blanquiazul.
La maquinaria del club se puso en marcha ya desde ayer con Manolo Gaspar a la cabeza y con Pablo Guede también implicado. Y ya hoy miércoles, antes de arrancar el entrenamiento, el técnico ha mantenido una charla con Antoñín en el que le ha explicado la gravedad de sus actos. No ha tenido de momento repercusión deportiva porque el atacante de la Palmilla se ha ejercitado con el resto de sus compañeros, aunque saltó al césped de La Rosaleda minutos después que la plantilla.
En el club desconocen si el vídeo corresponde a la jornada de ayer o es de hace más tiempo. En cualquier caso, lo estudiarán y valorarán imponer el régimen interno al jugador, ya que está completamente prohibido practicar deportes que puedan ser lesivos durante la temporada. En cualquier caso, no harán ninguna comunicación pública al respecto.
Lo cierto es que la imagen corrió como la pólvora por redes sociales en la tarde noche de este martes y fueron muchas las voces que criticaron la actuación del jugador. Antoñín, que empezó con buen bien con Guede, no llegó a jugar ni un minuto en el último compromiso con el Oviedo.
A Genaro, que ha hablado públicamente sobre el partido del domingo con el Tenerife, se le ha cuestionado sobre este tipo de situaciones extradeportivas que han aparecido a lo largo del curso. "Creo que fuera de lo que piense la gente tenemos que estar herméticos y estar más unidos que nunca. Estar mentalizados en el próximo partido. Apartar las malas vibras que pueden interferir en nuestro trabajo. Apartar las malas críticas", dijo en primera instancia.
Además, también se le cuestionó sobre si hay llamadas al orden dentro del vestuario entre compañeros. "Dentro del vestauiroo siempre hay charlas y hablamos entre nosotros. Es propio de la convivencia del vestuario. Lo que sea ayudar al equipo tiene que estar por encima del individuo y es lo que tiene que primar", dijo el mediocentro.
La sesión matinal no ha tenido mayor novedad salvo por el caso Antoñín. De nuevo Guede ha vuelto a tirar de la cantera para completar una sesión donde tiene numerosas bajas. Juande, Adrián, Javi Jiménez, Hicham, Jozabed y Ramón permanecieron en el gimnasio. Jairo, mientras, realizó carrera continua a buen ritmo en solitario.
Hasta once canteranos volvieron a estar a las órdenes de Guede. Los porteros Carlos López y Dani Strindholm; los defensas Benítez, Mati y Víctor Olmo; los centrocampistas Ismael Gutiérrez, Quintana y Dani Lorenzo; el extremo Kevin y los delanteros Roberto y Loren Zúñiga.