LaLiga puso este fin de semana punto y final a su primera temporada con VAR. El videoarbitraje ha intervenido en 121 acciones en el presente curso, pero al final su intervención no ha cambiado prácticamente una clasificación que sería casi idéntica sin la tecnología.
Una de la grandes novedades que presentó el fútbol español en este curso 2018-19 que llega a su fin (a falta de la final de Copa) fue la inclusión del VAR.
La tecnología de vídeo aterrizó en la máxima categoría del fútbol español de golpe y porrazo, siendo todo un atractivo por ver cómo sería su funcionamiento.
El videoarbitraje, a lo largo de los 380 partidos que ha habido en las 38 jornadas de Primera División, ha intervenido un total de 121 ocasiones.
El uso del VAR ha hecho que, en la presente edición de la competición, hasta 33 encuentros hayan cambiado su signo.
Una cifra más que relevante, ya que supone casi un 10% de los duelos, pero en bruto, clasificatoriamente hablando, su inclusión no ha supuesto ningún cambio drástico.
De hecho, si la tecnología no hibiera estado presente, ninguna de las siete primeras plazas (las de acceso a Europa) ni el descenso habrían cambiado.
Es decir, todos los equipos de las posiciones importantes de la compteición hubieran mantenido su suerte.
El Barça seguiría siendo el campeón destacado (con los mismos 87 puntos), superando al Atlético de Madrid y a un Real Madrid que seguiría en la misma tercera posición con 68 puntos.
La cuarta plaza que da acceso a Champions sería igualmente para el Valencia, aunque el conjunto 'che' sumaría cinco puntos más que los realmente cosechados.
Getafe, Sevilla y Espanyol seguirían manteniendo sus respectivos puestos (5º, 6º y 7º), accediendo todos ellos a la próxima Europa League.
Por su lado, por la zona baja, Girona, Rayo y Huesca hubieran descendido igualmente a Segunda División, aunque con el conjunto de Vallecas por delante de los gerundeses.
Por último, cabe destacar que los equipos más 'beneficiados' por la tecnología fueron Real Sociedad y Levante, a los que el videoarbitraje, en las veces que intervino y cambio una decisión, les ha dado cinco puntos por cabeza.