El empate entre el CF Unión Viera y el CD Mensajero (1-1) en el partido que abrió el pasado sábado la temporada 2018-2019 en el grupo XII de la Tercera División fue considerado "justo" por los entrenadores de ambos equipos, Jero Santana y José Antonio Robaina, respectivamente.
Santana dio por "bueno" el punto cosechado ante uno de los candidatos al ascenso, aunque no ocultó un cierto "sabor agridulce", ya que su equipo iba ganando hasta el minuto 81, momento en el cual llegó el penalti que permitió a los palmeros igualar la contienda.
"Fue un resultado justo, aunque el partido se estaba decantando para nosotros. El calor estaba pasando factura a los dos equipos. El rival nos estaba llegando en la segunda parte, aunque no con claridad, pero el penalti le dio vida", agregó el técnico local.
A su juicio, el Mensajero "arriesgó más tras el descanso", y por ello cree que las tablas "era lo más justo".
Con respecto al penalti convertido por Vianney, Jero Santana fue sincero: "En un principio pensé que no había sido, pero luego los jugadores me reconocieron que sí. En cualquier caso, fue un poco absurdo por la posición y el ángulo en el que se encontraba el rival, escorado en una esquina y casi de espaldas", añadió.
Por su parte, el entrenador del Mensajero, José Antonio Robaina, coincidió con el técnico rival en que el empate "fue lo más justo", pese a que en la segunda parte "se vio una película bien distinta".
"Salimos a tener la pelota desde el principio, pero el Unión Viera estuvo muy bien posicionado y en una pérdida nuestra nos hicieron el gol", anotado por Cristian Barrios en el minuto 41, el primero de esta temporada en el grupo canario de Tercera División.
En cualquier caso, el técnico grancanario del cuadro palmero recordó que "sumar siempre es positivo", así como que han tenido "un cambio sustancial" en la "columna vertebral" de la plantilla.
En la segunda jornada, el Unión Viera viajará a Lanzarote para medirse al CD Unión Sur Yaiza, mientras que el Mensajero recibirá en el estadio Silvestre Carrillo al CD El Cotillo de Fuerteventura.