El 14 de agosto del año pasado, comenzaba oficialmente la segunda andadura de Carlo Ancelotti como entrenador del Real Madrid. Tras unos primeros test previos a la campaña formal que se saldaron con bastantes dudas -un empate contra el Rayo, una derrota frente al Rangers...-, los 'merengues' se llevaron por delante al Alavés a domicilio.
Los vitorianos son justamente el próximo rival de los blancos, que han de resarcirse de su derrota contra el PSG en la ida de los octavos de final de la Champions League. La caída dolió especialmente por producirse merced a un gol en el último minuto del enfrentamiento que, para colmo, anotó Kylian Mbappé, gran anhelo del club de cara al mercado de fichajes veraniego.
En su primer envite con los 'babazorros', los hombres de 'Carletto' arrasaron. Se hicieron con los tres puntos por 1-4, un resultado que pocas dudas dejó sobre el terreno de juego, testigo de los primeros indicios de la buena y evidente sintonía entre Karim Benzema y Vinicius, líderes del esquema ofensivo del plantel.
Además, esta victoria fue la simiente de una racha de ocho encuentros consecutivos sin perder que precedió a la minicrisis auspiciada por sendas derrotas ante el Sheriff en la Champions y con el Espanyol como rival en Liga. Ahora, el Alavés vuelve a aparecer como el rival ideal para que un Real Madrid mermado -menos distancia en Liga para con el Sevilla y recién derrotado en la Champions- retome el vuelo.