No hubo el mejor ambiente a falta de cinco días para el Mundial de Rusia en el Krasnodar Stadium ni tampoco un fútbol de alta gama. Lopetegui ensayó ya con un once más típico del que formaron parte Isco, Busquets, Sergio Ramos y Rodrigo. Fue el delantero del Valencia la alternativa del técnico espaol en la búsqueda del mejor ataque de cara al debut del próximo 15 de junio ante Portugal.
El guion quedó escrito en los primeros minutos. Túnez dejó todo el protagonismo en un monólogo de España que llegó a ser desesperante en muchas fases del partido. A la 'Roja' le faltó soltura e ideas para descrifrar el problema que había planteado atrás el combinado tunecido, que se mantuvieron encerrados y esperando a un error que llegó. Y fueron varios que no perdonaría la Portugal de Cristiano.
Fallos que condenan en el Mundial
España, si quiere hacer un buen papel en Rusia, deberá corregir los errores que pudieron ponerle en aprietos. Thiago perdió un balón en el centro del campo y Túnez perdonó con un disparo flojísimo que paró De Gea. Esta vez se salvó la 'Roja', pero quién sabe si habrá una segunda vez con la misma suerte.
Odriozola se mostró activo, aunque su banda creó problemas a España, e Iniesta intentó dibujar un juego pesado y cansado. Túnez tuvo clara la estrategia: aguantar y tirar del robo tras pérdida para ahogar a España en su afán de sacar el balón jugado. A Lopetegui le queda que corregir y que encontrar otras opciones.
En otro error por la derecha, Sliti tocó con la punta de la bota el balón en lo que pudo ser el 0-1... o el 0-2 porque España mandaba y dominaba, pero no concretaba. Y eso, a veces, no sirve de nada en el fútbol.
Pólvora y tres centrales para ganar
Lopetegui movió tanto el banquillo que sacó a Lucas Vázquez, Asensio, Diego Costa, Iago Aspas... España tuvo que terminar jugando con tres centrales para ganar con una posesión que superó el 70%, pero con eso no es suficiente para el Mundial.
No se cansó España, que pidió penalti por mano de Malaaoul. El árbitro no quiso consultar el VAR antes de que Silva también desaprovechara otro remate que se perdió por mucho. Y tanto fue el cántaro a la fuente que terminó por romperse. Diego Costa recortó a Mathlouthi, perdió la referencia de la portería, pero encontró a Iago Aspas. El ángel que quiere un sitio en el Mundial.
Disparó potente a asegurar y llegó el premio para una España que terminó aprobando el último examen antes de medirse a Portugal por más por oficio que por goles.