El reglamento está para cumplirlo y Henderson así lo hizo. Después de fallar el penalti, era consciente de que no podía volver a intentar el disparo, así que se lanzó al suelo. Vincenti estuvo atento y convirtió el penalti fallido en un tanto para el recuerdo.
Pero... ¿qué dice exactamente el reglamento? ¿Era necesario lo que hizo Herderson? Pues la respuesta es que sí.
La norma dice, literalmente, lo siguiente: "El ejecutor del tiro penal jugará el balón hacia delante con el pie, no podrá volver a jugar el balón hasta que el esférico haya tocado a otro jugador".
Por tanto, si, después de que se lance un penalti, el que chuta toca por segunda vez el balón antes de que el esférico haya tocado a otro jugador, se concederá un tiro libre indirecto al equipo contrario.
Así, los de Rochdale dieron ejemplo de que se saben el reglamento de carrerilla. Cualquier otra acción hubiera puesto contra las cuerdas al equipo.