Tras conocer el relato de Martin Braithwaite sobre el desplome de Christian Eriksen, ahora fue el turno de Anthony Taylor, colegiado de aquel Dinamarca-Finlandia de la Eurocopa 2020, que explicó cómo vivió aquellos instantes.
"Pude ver su cara mientras cayó. Supe de inmediato que algo andaba mal por cómo se veía su cara y cómo cayó al suelo. Eso es lo que más me preocupó", admitió el árbitro, que se encontraba próximo a Eriksen en el momento del colapso.
Para Taylor, su principal prioridad siempre es "la seguridad de los jugadores", por lo que tuvo claro qué debía hacer: "En el instante en que sucede, el único objetivo es asegurarse que Christian reciba el tratamiento que necesitaba".
"Los verdaderos héroes de esa noche fueron el capitán danés y los médicos que realizaron la primera reanimación cardiopulmonar y el uso del desfibrilador", afirmó el colegiado en relación a la actuación de Simon Kjaer y los sanitarios que allí se encontraban.
Anthony Taylor no pudo comunicarse con Eriksen tras el partido, pero sí le envió un mensaje en los días posteriores. Con quien sí habló fue con el guardameta Kasper Schmeichel, con quien tuvo "una breve conversación sobre cómo estaba Christian".