A nadie le gusta estar en el centro del rondo. Cansa, y mucho, perseguir el balón, y si encima tus compañeros son una banda de abusones, el resultado puede ser desastroso.
Que se lo digan al pobre Arthur, que este viernes tuvo que pasar nada menos que tres veces por el castigo, y ya no es que le 'toreasen', es que le humillaron. Tres veces.
Porque las tres veces que pasó por el centro del rondo, Arthur se llevó un caño. En total, tres caños que, pese a sus esfuerzos para que no sucediera ni volviera a suceder, desataron la creciente carcajada de sus compañeros. Y eso, con un 'troll' profesional como Piqué cerca, es un verdadero peligro.
29 de marzo de 2019