Con el parón de selecciones, el conjunto dirigido por Tite volvía a escena. Esta vez ante Arabia Saudí, combinado con Juan Antonio Pizzi al mando, siempre rocosos todos sus equipos.
Los orientales consiguieron resistir hasta el minuto 44, cuando Neymar consiguió regatear a dos adversarios y conectar un último pase para Gabriel Jesus, bien colocado esperando el envío en banda.
El delantero del Manchester City no perdonó en el uno contra uno y puso el 0-1 en el marcador para la Selección Brasileña, con algunas novedades, como la de Fabinho en el lateral derecho.
12 de octubre de 2018