El Mundial de Clubes, un torneo que reúne a los campeones de cada competencia intercontinental, siempre tiene historias que contar. La hegemonía europea no impide que, cada año, la atención recaiga sobre equipos desconocidos para muchos aficionados del fútbol.
En la presente edición destaca la participación del AS Pirae, un equipo que llegó de casualidad para representar a Oceanía, pese a no ser campeón en dicho continente. Todo se lo debe a las restricciones derivadas de la pandemia.
La Champions League de Oceanía no se celebra desde 2019, por lo que la OFC decidió hacer un ránking de rendimiento de los últimos años para elegir a su representante. El primero fue el Auckland City, equipo neozelandés que ha participado en más de una ocasión en el Mundial de Clubes.
No obstante, las fronteras en su país permanecen cerradas, por lo que su presencia en los Emiratos Árabes era inviable. El segundo elegido fue el Tiga Sport, de Nueva Calcedonia, pero no pudo presentar los documentos necesarios, algo que el AS Pirae sí consiguió.
Por lo tanto, este humilde equipo de Tahití se postuló como representante de Oceanía. Esta histórica participación tiene también su lado humano, como bien indicó 'Marca'. La promesa de la plantilla, Haumau, estudia mecánica a sus 17 años. Por otro lado, Tninirauarii es policía y, al igual que otros compañeros, tuvo que pedir días libres en el trabajo.
Otro aspecto que llama la atención es que el equipo tuvo que realizar una larga travesía para presentarse en los Emiratos Árabes. Desde la remota isla del Océano Pacífico hasta el país asiático hay 17.500 kilómetros, lo que se traduce en 38 horas de viaje. No obstante, esta distancia siempre es corta para un vestuario con ganas de hacer historia a nivel internacional.
February 3, 2022