El ascenso con Mendilibar, el espejo en el que se mira el Valladolid de Pacheta

La temporada no ha empezado del todo bien para el Valladolid. Siete puntos tras seis jornadas se antoja un premio muy escaso para un equipo que aspira a ascender. Pero hay un precedente que llena de esperanza a los blanquivioletas.
Cuando el Real Valladolid ascendió en la temporada 2006-07, con José Luis Mendilibar como entrenador, también llegó a la jornada séptima con solo siete puntos. De hecho, el de Zaldibar estuvo a punto de ser cesado.
No se hizo, y logró reconducir la situación, y llevó al Valladolid de vuelta a Primera como campeón de la categoría de plata, con 88 puntos de récord, una cifra nunca antes alcanzada en Segunda y solo superada por los 91 del Dépor en 2012.
Aquel curso empezó como este, regular. El Pucela ganó sus dos primeros partidos (1-3 en Gijón, 2-0 a Las Palmas), pero luego encadenó dos derrotas consecutivas (1-0 ante el Ciudad de Murcia y 0-1 ante el Poli Ejido).
La quinta jornada fue un empate a uno en Jerez, y la sexta, otra derrota, 2-3 ante la desaparecida Unión Deportiva Salamanca. Pero entonces, en la séptima jornada, el Lorca Deportiva visitó Zorrilla, cayó 1-0 y el Valladolid inició una impresionante racha de 29 partidos sin conocer la derrota.
Solo perdió de nuevo cuando el ascenso a Primera era ya matemático. Acabó la temporada con 26 triunfos, diez empates y solo seis derrotas, tres al comienzo del curso y tres con el ascenso en el bolsillo.
El Valladolid ha empezado el presente curso similar, con un empate, dos victorias y tres derrotas consecutivas. Llega a la séptima jornada con el precedente de un ascenso histórico.
El Alcorcón, colista de Segunda, puede ser el Lorca Deportiva que haga a los de Pacheta, como entonces el cuadro murciano a los de Mendilibar, cambiar el chip y remontar el vuelo.