En el minuto 73, Benzema miró al banquillo y a Solari ni se le pasó por la cabeza arriesgar con el francés. El '9' está de dulce y el argentino, con su equipo ganando 0-1, paró los pies a su delantero. Miró a los hombres que calentaban y llamó a Asensio, que no es titular desde el pasado 15 de diciembre.
Pasó por una lesión, una recaída y, ante todo, por una alarmante pérdida de confianza. Tras un inicio de curso esperanzador, Asensio comenzó a perder el paso. A ser cada vez más suplente, a desaparecer de los planes de Solari. Cinco goles y cuatro asistencias, sus registros esta temporada.
Por ello, los casi 20 minutos que estuvo sobre el césped ante el Ajax eran claves para él. Por muchas razones, aunque la más importante es la enorme competencia que existe a día de hoy en su posición. Para dos puestos pugnan Vinicius, Bale, Lucas Vázquez y Asensio. Mucho 'gallo' para solo dos plazas.
Tuvo que tragar saliva el balear cuando, nada más ingresar en el terreno de juego, el Ajax empataba la contienda. No fue problema para él, que desde el primer momento demostró que está poniendo todo de su parte para volver a ser decisivo. Se le vio rápido, destacando de nuevo por su cambio de ritmo.
Buscó en hasta tres ocasiones el lanzamiento lejano, una de sus grandes especialidades. No tuvo suerte de cara a puerta... hasta que llegó un contragolpe letal lanzado por Lucas, continuado por Carvajal y abrochado por Asensio. Gol y celebración especial, Holanda es su segunda casa. Asensio parece que ya está de vuelta.