Así fue la jornada en Segunda

Ambos clubes dieron la sorpresa de la jornada para poner un poco de picante a la zona de arriba de la clasificación, que, sin embargo, tiene casi decidida sus dos primeros puestos. Sobre todo el del Levante, que, pese al empate, aún mantiene una diferencia de 19 puntos sobre el tercero a falta de que el Cádiz dispute su partido el domingo.

El cuadro de Juan Ramón López Muñiz cedió dos puntos en el estadio más insospechado, el del Mallorca, penúltimo clasificado de LaLiga 1/2/3 y que fue capaz de igualar el tanto de Jason en el primer cuarto de hora del partido.

Lo consiguió Ion Ansotegi, apenas siete minutos después de la expulsión por doble amonestación de Rober y el Mallorca, con ese tanto, aunque provocó el pinchazo del ogro de la categoría, bajó a la penúltima posición por la victoria del Almería.

Poco después, en el Carlos Tartiere se certificó la derrota del Girona ante el Oviedo, que aprovechó el doblete de Toché para llevarse tres puntos importantísimos en su pelea por acabar entre los seis primeros y, por qué no, tal vez en la segunda plaza.

El equipo de Fernando Hierro se coloca a 9 puntos del Girona y aún puede soñar con el ascenso directo. El acierto de Toché fue básico. Primero, con un cabezazo tras una asistencia de Miguel Linares prácticamente en el primer instante de la segunda parte y, después, con un zurdazo desde el interior del área. Sus tantos, fueron de oro.

En el Nuevo Estadio José Zorrilla, el Valladolid desperdició la oportunidad de ocupar la sexta plaza de forma provisional a la espera de los partidos del domingo. El conjunto de Paco Herrera perdió 1-2 frente al Nàstic, que sumó tres puntos muy importantes en su lucha por no descender.

Aunque el conjunto pucelano dominó el primer tramo del choque con un par de ocasiones de Juan Villar y de José Manuel Arnaiz, fue el Nàstic el que se adelantó en el marcador al final de la primera parte, con un remate a placer de Bruno Perone tras un saque de falta.

Villar, muy insistente durante toda la tarde, provocó un penalti a los cuatro minutos de la reanudación que transformó él mismo para dar esperanzas a su equipo de sumar los tres puntos.

Sin embargo, la lesión del central Rafael López modificó el esquema del Valladolid, descolocado con la entrada de Raúl de Tomás, y el Nàstic aprovechó la situación para hacer el segundo, obra de Manu Barreiro, que confirmó la irregularidad constante que mantiene el equipo de Herrera a lo largo del curso.

En el duelo más emocionante de la jornada para salir de las posiciones de descenso, el Almería ganó 3-1 al Alcorcón y cogió algo de aire en su lucha por acercarse a la decimoctava posición que da la salvación. Y, ya de pasó, metió en un problema a un rival directo por mantener la categoría.

El cuadro andaluz logró su primer triungo con Luis Miguel Ramis en el banquillo y se colocó a sólo un punto de la permanencia gracias a dos tantos de Quique González en momentos clave del encuentro.

El primero de ellos, en el minuto 27, sirvió para adelantar al Almería con un certero cabezazo que respondió David Rodríguez a media hora del final para empatar el choque.

Sin embargo, sólo un minuto después, de nuevo Quique, tras un centro de Fidel, volvió a marcar para poner el 2-1 en un marcador que no sería definitivo: en un contragolpe, Antonio Puertas, tras un pase de Quique, cerró la cuenta y dio aire a un equipo que se lo quitó al Alcorcón, que no pudo salir del descenso tras perder en el Estadio de los Juegos Mediterráneos.

No hubo tanta emoción en Soria, donde el Numancia y el Rayo Vallecano empataron 0-0 en un encuentro en el que la falta de puntería fue la gran protagonista. Mientras que el equipo soriano vive más o menos tranquilo, el de Míchel necesitaba ganar para espantar los fantasmas del descenso.

El choque, con pocas ocasiones hasta el último tramo, fue en general aburrido y con poco fútbol con sólo un par de ocasiones en la primera para los locales (Julio Álvarez y Carlos Gutiérrez) y otra para los madrileños (Javi Guerra).

Hubo que esperar a los últimos 20 minutos para ver un encuentro más abierto con más ocasiones que no acabaron en gol por la falta de acierto de Numancia y Rayo. Al final, el 0-0 mantiene al Numancia en la zona media tras seis jornadas sin conocer la victoria y al Rayo rozando el descenso y con todas las alarmas encendidas.