Después de un gran inicio de temporada, el equipo se ha ido diluyendo y, tras la derrota en Lugo del pasado domingo (1-0), los reusenses ya se han situado a cuatro puntos de la zona de peligro.
Por todo ello, los jugadores quieren cambiar la situación de inmediato, y Pichu Atienza, central titular del equipo rojinegro, ha reconocido que no "no estuvimos acertados de cara a gol, ni en el último pase, ni en el remate".
Atienza ha explicado que el Reus "está dolido por la derrota del otro día, y más siendo en los minutos finales", aunque su estado de ánimo le empuja a "mirar hacia el futuro" y mejorar el juego para "seguir siendo tan seguros como somos defensivamente, e intentar ponernos por delante en el marcador cuanto antes para quitarnos la espinita del gol y afrontar un partido en el que el contrario tenga que arriesgar un poco más".
No menos importante que todo ello es, según Pichu Atienza, la ayuda de la afición.
"Que vengan con ganas, que los necesitamos. Es clave que la gente apriete y que los sintamos cerca", ha manifestado el jugador.