Atlético Nacional se marcha de Bolivia con un empate que bien vale un triunfo

Salió en tromba Bolívar con una única idea en mente: ganar el partido, a ser posible por más de un gol. Con lo que no contaban los locales es con que Atlético Nacional fuera a encerrarse y a aguantar estoicamente las acometidas celestes, una tras otra.
Juanmi Callejón y Juan Carlos Arce llevaron el peligro una y otra vez por sus respectivas bandas, apoyados por los desdobles de Capdevila y Saavedra. Estos cuatro fueron los mejores del partido, con permiso de Miguel Borja, claro.
La primera parte fue una sucesión de ocasiones sobre la meta de Franco Armani, una tras otra. Bolívar percutía una y otra vez, pero la zaga 'verdolaga' estuvo firme, y su arquero, inmejorable.
La ocasión más clara del partido llegó con un centro de Arce que el capitán Cabrera, en fuera de lugar, remató a un metro escaso de la línea de gol por encima del travesaño de Armani.
Segundo asalto
Con la sensación de haber sobrevivido a un bombardeo se marchó Nacional al descanso. Bolívar sabía que de seguir así el gol llegaría, pues la altura terminaría por pesar en los pulmones colombianos.
La reanudación fue más de lo mismo. Bolívar atacando con todo y Nacional defendiéndose como buenamente podía. Atlético Nacional lo tenía claro: los cuatro defensores y los tres centrocampistas, atrás, que ya se encargarían de atacar Mosquera, Berrío y Borja, con apariciones esporádicas de Macnelly Torres.
Y así fue todo el partido, Nacional encerrado atrás, aguantando los ataques, y lanzando balones largos para que Mosquera o Berrío corrieran a por ellos.
Del 1-0 al 1-1
Cuando nada podía romper este punto muerto en que se encontraba el partido, llegó el penalti de Nájera. Una clamorosa mano dentro del área fue cobrada por el árbitro paraguayo de la contienda, y señaló penal. Lo fue a patear Arce.
Y se lo detuvo Armani, broche de oro a un partidazo espectacular. Pero no tuvo tanta fortuna, pues el rechace cayó para que el propio Arce lo cabeceara al fondo de las redes.
Llegó el ansiado gol de Bolívar, y eso no impidió que siguiera volcado sobre la meta de Armani. Craso error, pues en el único error defensivo celeste llegó el gol de Nacional.
Grotesco error de Eguino, el único de todo el partido, que permitió a Berrío lanzar una contra y plantarse sólo, mano a mano, con Quiñónez. Pero se durmió en los laureles, llegaron las ayudas defensivas y perdió el balón.
Por fortuna para los 'verdolaga' apareció Miguel Ángel Borja en segunda línea y remató para alojar el balón en el fondo de las redes.
Cinco cambios para que nada cambiase
Tras el tanto del empate, el carrusel de cambios. Bolívar refrescó su ataque y posteriormente lo reforzó. Atlético Nacional se cerró aún más atrás, cambiando a un delantero por un tercer central. Y ahí murió el encuentro.
Quedaban 20 minutos, pero el guión no varió. Bolívar siguió lanzado al ataque, y Atlético Nacional hiriendo a la contra. Berrío tuvo en sus botas por partida doble el gol de la victoria, pero en ambas falló. Previamente Borja tuvo otra gran ocasión, pero esta vez falló porque se resbaló a la hora de quebrar a su par.
Gran resultado para los intereses de Atlético Nacional, pues a buen seguro que no contaba con marcar en campo ajeno. Bolívar tiene ahora una difícil papeleta por delante: ganar al campeón de la Libertadores en su casa, con la desventaja del gol encajado en La Paz. Saldremos de dudas en un par de semanas, tras los compromisos internacionales.