Hay días que llegan y otros que aparecen, sin más. El de hoy, con el consumado adiós de Cristiano, es de esos que cambian, que obligan a reflexionar sobre el paso del tiempo y que evidencian que los clubes terminan estando por encima de cualquiera. Incluso de las leyendas. Los registros quedan, los dorsales se retiran, pero los años pasan hasta para los mejores. Que se lo digan a Maradona.
La unión entre Cristiano y el Real Madrid ha sido la más prolífica del club blanco desde que Santiago Bernabéu fue el más listo de la clase para llevarse a Di Stefano. Cinco Copas de Europa con el argentino, cuatro con el portugués. Los dos periodos más brillantes de la historia del mejor club del Siglo XX para la FIFA.
En su día se fue Di Stefano y ahora se va Cristiano. Se les rompió el amor, de tan grandioso quizás. Tras nueve años de goles, récords y títulos que le han servido para alcanzar los cinco Balones de Oro y mantenerse a la vera de un Leo Messi colosal. El duelo de titanes ha extrapolado a sus respectivos clubes a un escalón que les ha permitido ganar las cinco últimas Champions League.
Con su marcha a la Juventus se abre un escenario nuevo en el fútbol. No ha sido a costa de romper el mercado, se va por un precio justo (105 millones de euros) y porque quiere. El Madrid no le forzó, pero no hizo todo lo que el portugués cree que merece una estrella como él. Su edad no se corresponde con su rendimiento, pero es difícil abstraerse de un dato que si tiene una excepción es precisamente con Cristiano, el particular Benjamin Button del fútbol en la era del talento precoz.
Hasta Cristiano, nadie pudo ser Di Stefano
La venta de Cristiano es un frenazo al mercado, a la loca burbuja que se ha inflamado en estos últimos años y que tiene al PSG meditando gastarse más de 200 millones en Coutinho. Hoy, el Balón de Oro se marchará por mucho menos que Neymar, Mbappé, Dembélé o Coutinho. Da que pensar.
Italia le propone un nuevo reto. La 'Signora' vuelve a ser 'Vecchia'. Al igual que la Serie A. Tras años a la estela de LaLiga o la Premier, el fútbol italiano recuperará esplendor con la llegada de Cristiano Ronaldo. Desde que el Inter le arrebatara a Ronaldo al Barcelona, no se había contemplado un trasvase de este calibre con dirección a Italia, siempre a la inversa.
Ahora la respuesta del Real Madrid también marcará un antes y un después en la historia del fútbol. Tiene dinero, pero cada solución implica un camino. Y detrás de cada puerta (Kane, Neymar, Mbappé...) hay un mar de dudas. Porque en el mercado no hay nada que se acerque a lo que se va. El heredero de Cristiano afrontará un reto descomunal. Hasta Cristiano, nadie pudo ser Di Stefano. ¿Cuánto pasará hasta que alguien pueda ser Cristiano?
Aun así, con sus dimes y diretes, sus llantinas, sus enfados y su egolatría, Cristiano Ronaldo es un futbolista sideral que ha elevado al Real Madrid a cotas históricas. Se cierra una etapa de leyenda. Sólo queda darle gracias y disfrutarle en la Juve. Italia le espera. Bella ciao, ciao, ciao.