Sin grandes alardes, pero con mucho oficio. Así se ha impuesto la Juventus a la Roma en Turín esta noche. Bastó un tanto a los 19 minutos de partido para doblegar la voluntad d elos 'giallorossi'.
Allegri, siempre controvertido, volvió a dar una lección de fútbol al replantear de nuevo el juego de los suyos para anular a la Roma. Porque el italiano volvió a dar con la tecla. Aunque fuera a costa de dejar a Dybala todo el partido en el banquillo.
Así, la Juve comenzó el encuentro replegada y buscando la velocidad de Cuadrado o la altura de Mandzukic, con Pjanic repartiendo balones como sólo él sabe en la medular.
Parecía cuestión de tiempo que el gol llegase, y sólo se demoró 20 minutos. Benatia remató un córner, Alisson hizo la parada de su vida, el balón le cayó de nuevo a Benatia, y la estrelló en el travesaño.
A la tercera fue la vencida, y el marroquí encontró el premio a su instantanea constancia con un gol vital para las aspiraciones ligueras de su equipo.
La Roma no se amedrentó, pero hoy Szczesny estaba especialmente inspirado, y entre él y la madera (que se lo digan a Florenzi y Schick), mantuvieron la meta 'bianconera' a cero.
Así, la Juve sigue a un punto del Nápoles, mientras que Inter y Roma ya están a cuatro y seis puntos de la 'Vecchia Signora', y se descuelgan de la lucha por el 'Scudetto'.