El Monza, equipo del que es dueño el italiano Silvio Berlusconi, perdió ante un acertado Torino (1-2) su primer partido en la máxima categoría del fútbol italiano en sus 110 años de historia.
No fue un mal estreno, en cuanto juego y competitividad, del Monza en Serie A. Pero enfrente tuvo a un sólido Torino que tiró de veteranía y supo leer mejor el encuentro para, sin pasar demasiados apuros, solventar el encuentro.
Con menos posesión de balón, y con prácticamente los mismos datos en cuanto a ocasiones creadas y disparos, el Torino encarriló el partido justo antes del descanso gracias al tanto del ruso Aleksey Miranchuk.
La segunda mitad fue más de lo mismo, partido igualado en el que el Monza, bajo la atenta mirada de Berlusconi y Galliani -artífices del Milan que reinó buena parte de la Serie A y la Liga de Campeones en los años 80 y 90-, llevó por momentos la voz cantante, aunque sin éxito.
En el minuto 66 llegó el castigo definitivo para los recién ascendidos de la mano del paraguayo Antonio Sanabria, que con un remate acrobático dejó el partido visto para sentencia.
Ya en los últimos compases, sin tiempo para remontar, en el minuto 94, el portugués Dany Mota recortó distancias para los locales con un remate a puerta vacía tras un rebote.
El Monza se estrena con derrota en la Serie A, eso sí, con brotes verdes ante un Torino que tiró de experiencia para llevar el partido a su terreno.