Martin Braithwaite está convencido de que puede triunfar en el Camp Nou. En los últimos meses ha repetido bastante ese mensaje. A pesar de que en la primera jornada posparón tuvo un día feliz para alentar ese anhelo, otros dos más le han demostrado lo dificíl que será.
El danés fue titular en el Visit Mallorca Estadi, algo que celebró anotando un tanto en la primera mitad. Sin duda, un gran punto de partida para reivindicarse en lo que queda de temporada.
El partido siguiente tenía el añadido especial de ser contra su ex, pero Quique Setién optó por no darle un solo minuto. Simplemente, fue una rotación para descargar minutos en las piernas tres días después de jugar.
De hecho, su titularidad en el Sánchez-Pizjuán reforzó esa teoría. Eso sí, su versión ante el Sevilla resultó bastante pobre, apenas tuvo continuidad ni dispuso de ocasiones para hacer daño arriba.
Y es que han sido muchos los buenos jugadores que han vestido la camiseta del Barcelona, pero no tantos los que han triunfado. Ser constante en el juego y en la influencia en los partidos es el gran reto para que Braithwaite pueda cumplir su sueño, por más que trabaje para ello.