Entran sudores fríos en los aficionados de Brasil cuando se menciona el Mineirao. Todo cambió el 8 de julio de 2014. La 'Canarinha' se veía en la final de su Mundial antes de que Alemania sacase el rodillo.
Aquel 1-7 en el Mineirao cambiaría la historia de Brasil. Desde entonces, la alegría que siempre ha transmitido la hinchada de la 'Canarinha' ha pasado a un segundo plano en los partidos.
Ni siquiera el oro conseguido en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016 ha limpiado la imagen de la 'Canarinha', que desde entonces no se ha recuperado de la paliza de Alemania.
Y es que la selección dirigida por Löw, que posteriormente conseguiría el título ante Argentina, humilló hasta el penúltimo minuto a Brasil. Solo el gol de Oscar en el minuto 90 impidió el rosco de la 'Canarinha'.
Así, cinco años después de la mayor derrota sufrida en casa por Brasil, los 'verdeamarelhos' volverán a la escena del crimen, donde les espera una Argentina que quiere seguir prolongando la pesadilla del Mineirao.