El regreso de Kike Barja con sus compañeros es la gran novedad del día en Osasuna. Regresa tras un mes de recuperación en el que el veloz extremo ha trabajado en solitario para dejar atrás la distensión en la fascia plantar de su pie derecho y la lesión fibrilar en el flexor corto del primer dedo que sufrió ante el Celta.
El de Noáin ha estado junto a los futbolistas que contaron con menos minutos frente al Betis en los ejercicios de técnica y posesión, así como también en el partidillo de fútbol. La de este viernes ha sido una sesión no muy exigente, por lo que habrá que ver cómo responde el canterano a las habituales jornadas de trabajo con toda la plantilla disponible.
Por su parte, el croata Ante Budimir sigue con su trabajo específico, por lo que su presencia en Mallorca el domingo parece improbable. Su arranque liguero no ha sido el esperado y el jugador más caro en la historia rojilla deberá esforzarse en volver al nivel mostrado la campaña pasada en la que alcanzó las once dianas.
Osasuna volverá este sábado por la mañana a Tajonar y Jagoba Arrasate ofrecerá la convocatoria al término de la sesión antes de poner rumbo a Mallorca por la tarde.