El Cagliari consiguió este domingo una victoria fundamental ante el Empoli (0-1), rival directo en la lucha por la permanencia, y aumentó la presión en la zona de peligro de la Serie A gracias a una encomiable actuación del colombiano Yerri Mina en defensa.
La victoria del Hellas Verona sobre el Sassuolo, el empate en el Frosinone-Lecce y el triunfo del Calgiari, el primero a domicilio de la temporada para los 'sardos', han dejado en apenas 5 puntos al penúltimo y al 13º.
El Empoli tenía la oportunidad de poner tierra de por medio y crear un cierto colchón con la zona baja, pero el conjunto de Ranieri se sobrepuso al equipo del técnico italiano Davide Nicola, recién llegado al banquillo, que no había perdido desde su debut.
Y eso que fue el Empoli apretó por la victoria, especialmente en la primera mitad. De hecho, consiguió adelantarse en la segunda con un golazo del neozelandés Libertato Cacace, anulado tras varios minutos de revisión del VAR por fuera de juego en la jugada previa.
El tanto, lejos de asustar a los de Cerdeña, sirvió al Cagliari para despertar y, apenas un par de minutos después, llegó la acción definitiva del duelo.
El italiano Oristiano Gaetano, ex del Nápoles y jugador más talentoso de los 'Rossoblu', filtró un balón a la espalda de la defensa en busca de la línea de fondo. El centro posterior acabó en pies del uruguayo Nahitán Nández, que disparó sin éxito, aunque el rechace cayó manso a los pies del checo Jakub Jankto, que definió para sentenciar el encuentro.
Intentó darle la vuelta sin éxito el Empoli, pero se topó una y otra vez con el muro que levantó Yerri Mina, líder indiscutible de la zaga de un Cagliari que no renuncia a la salvación. Los 'Azzurri' se sitúan en el 14º lugar con 25 puntos y el equipo de Ranieri queda antepenúltimo, en descenso, con 23 unidades.
Por otro lado, Frosinone y Lecce no fueron capaces de evitar las tablas (1-1) en un choque intenso e igualado que mantiene a ambos equipos conjuntos en la ajustada pelea por escapar del descenso.
Los dos sumaron un punto que supo a poco porque tuvieron oportunidades de llevarse la victoria. El Frosinone, de hecho, vio cómo el VArR le anuló un tanto en los compases finales y cómo el italiano Wladimiro Falcone, el meta del Lecce, desvió una ocasión muy clara en los últimos segundos con una mano salvadora.
Ni si quiera el talento local, el argentino Matías Soulé, propiedad de la Juventus, pudo decantar un duelo que empezó de cara para su equipo, que se adelantó con el tanto del marroquí Wallid Cheddira al borde del descanso.
Un golpe duro para el Lecce que, sin embargo, supo reponerse y salió dispuesto en la segunda mitad a ir a por la remontada. Su recompensa llegó en una jugada extraña, con varios actos.
En una mala salida de balón del Frosinone, el italiano Michele Cerofolini, portero local, se vio obligado a cometer penalti. Lanzó el montenegrino Nikola Krstovic, pero atajó el meta. El VAR revisó la jugada y mandó repetir el penal por invasión del área de los jugadores del Frosinone. Volvió a lanzar Krstovic, ajustó el disparo al palo y salió repelido por la madera directamente a la espalda del portero, que introdujo involuntariamente el balón en su propia puerta.
El empate no se movió del marcador pese a que ambos equipos tuvieron oportunidades claras y dejó al Lecce décimo tercero con 25 puntos y al Frosinone décimo sexto, con 24 unidades. Ambos equipos están a pocos puntos de un descenso que marca el Cagliari, con 23.