Un día y un partido es el legado de Razak Brimah en el Real Jaén. Este jugador protagonizó una de las carambolas de la ventana de traspasos. Llegó a un acuerdo con la entidad andaluza, que milita en Tercera RFEF esta temporada, pero sin estampar su firma en un contrato, sino a tenor de un consenso verbal.
Este es un recurso usual antes de que las partes terminen de dar forma al papeleo. El problema es que el profesional se echó atrás un día después de haberse unido a las filas de una escuadra con la que incluso le dio tiempo a debutar. La propia entidad lo explicó en dos mensajes publicados en su perfil de Twitter.
"Ayer (refiriéndose al 31 de agosto), se presentó el fichaje de Razak Brimah tras un acuerdo verbal, a falta de la firma del contrato, y ese acuerdo se solidificó con el debut por la tarde-noche en Valdepeñas. Esta mañana (1 de septiembre), el jugador ha comunicado al entrenador y al club su decisión de no firmar lo que se había acordado, por lo que se desvincula del club", reza el escrito.
El mismo ha desatado cierta indignación por parte de los seguidores. Unos criticaron la falta de compromiso del futbolista, si bien otros apuntaron que la directiva debería haber aguardado a un contrato formal para anunciar su incorporación. Pudo saltar al campo para su primer encuentro porque se trataba de una cita no oficial.
September 1, 2021